31/10/10

Puchero

{...}Juan entró a la morgue y atrás vio una gran lámpara como un disco que iluminaba la mesa de trabajo de Urtubei, el que con un gorrito y un delantal camuflados en tonos desérticos, depositaba en una balanza de carnicería torpemente algún pedazo de carne.
-¿A cuanto el kilo de puchero?-Lo bromeó Peña.
-Este es el hígado.-Contestó y habló a un pequeño micrófono que tenia prendido en una de las tiras del delantal.-Hígado peso y color normal.-Después se acercó a un punto rojo y toco un botón. Apagó la cámara.
-Sos medio fetichista loco, como te gusta filmarte.
-Calláte pendejo, es para que los atorrantes de mierda estos no salgan a decir que me afano órganos.- Se sacó el barbijo y de un saltito se sentó en la mesa donde estaba abierto el cadáver.
-¿Qué le ha pasado?
-Pendeja, estudiante, vivía en un monoambiente por el lado de la Quinta. Debe haber estado preparando alguna materia para estas mesas.- Urtubei le acomodó la sabana verde doblada que tapaba la cara del cuerpo.-Asfixiada, tenia el calefón fallado. Una cagada hermano.
Juan se quedó perturbado al imaginarse la vida de la chica que tenia al lado, seguramente era de otra provincia o del interior de Tucumán. Tantos sueños rotos, tantas horas desperdiciadas, tanto por vivir. Una verdadera cagada. Franquie cortó su flash.{...}


vivir solo cuesta vida!!

1 comentario:

Natys! dijo...

Oh my god! te volviste sensible?
Mirá que hacía rato no venía, te estará afectando tanta muerte por la tele?
La frase final ni a palos que la esperaba, osea, miré si había entrado bien jaja!
Me gusta un aDo así como con sentimientos al aire eh, ojo!
Besos!